La Reserva Ecológica Antisana, creada como tal el 21 de julio de 1993 que comprende 120.000 hectáreas, está situada en dos provincias, una de la serranía, Pichincha y una del oriente, Napo, en la vertiente oriental de la Cordillera de los Andes a 50 kilómetros de Quito. Su clima varía entre frío, templado y sub tropical, con temperaturas que dependiendo de su altitud, van desde los tres a los 17 grados centígrados.
Sus formaciones vegetales la componen bosques y páramos de varios tipos. Su flora depende de la zona. En la zona alta (3.100 a 4,700 metros sobre el nivel del mar) hay extensos pajonales de pumamaqui, bosques de papel, pantza, flores silvestres, líquenes, musgo de almohadilla, chuquiraguas, orquídeas y la paja típica del páramo. En la zona baja (1.200 a 3.100 metros) que comprende las dos terceras partes de la Reserva hay bosques de alta montaña que son refugio para las especies amenazadas como nogal, laurel de cera, cedro, arrayán, palma de ramos y motilón.
Su fauna cuenta con 552 especies de vertebrados, 481 de aves, 73 mamíferos y 61 reptiles. Entre los mamíferos sobresalen: el puma, el mono araña de vientre amarillo, osos de anteojos, gato andino, tigrillo chico, lobo de páramo, zorrillo, cervicabra, venado de cola blanca, guafando, dantas de montaña (tapir), y murciélago, conejo, ciervo enano y varios tipos de monos; entre las aves existen: el cóndor, el ibis de cara negra, cuscungo, gaviotas andinas, quilicos grande y chico, y lechuzas de campanario y de campo, patos torrenteros, colibrí estrella, cantabonito, gavilán de espalda colorada, golondrina, ligle, bandurrias, curiquingue, loro, pato, azulejo, zumbador, bencejo, chunquisy el cara – cara, más conocido como quiriquingue.
Entre los anfibios están la rana marsupial y los jambatos. Además de la fauna nativa, en los páramos del Antisana habitan grandes poblaciones de ovejas, caballos y ganado vacuno; también existe abundante trucha introducida en los ríos y lagunas del área, y la prenadilla, única especie nativa.
Para llegar a la Reserva Ecológica Antisana existen dos vías. La primera es por la vía Quito-Pintag, en la que es necesario caminar 25 Km. hasta llegar a la Reserva, o alquilar transporte privado. Por este camino, vía Píntag, se llega a la laguna de la Mica, famosa por su pesca deportiva. El otro acceso es por la carretera Quito-Baeza con el cual se llega al área oriental de la Reserva, desde ésta se accede a tres caminos secundarios. Si usa transporte privado se recomienda ir en automóvil con doble tracción (4×4).Para hacer excursiones de un día, se recomienda llevar ropa abrigada, vistiéndose en capas, poncho de aguas, sombrero o gorra, buenos zapatos para caminar, gafas para el sol, bloqueador solar y binoculares.
Fuente: http://www.ecuadorextreme.com.ec/reserva-ecologica-antisana-2/